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Vacaciones, a cuidar la alimentación de los niños

Gerardo Juan Rodríguez Hernández

Gerardo Juan Rodríguez Hernández Dirección de Nutrición

De manera cotidiana los padres procuramos mantener un estilo de vida saludable cuando los niños van a la escuela: preparamos desayunos, almuerzos, lonches o refrigerios escolares, y procuramos incluyan verdura y fruta, además nos aseguramos que por las tardes los niños realicen actividad física y que estén el mayor tiempo posible activos. Pero ¿qué va a pasar ahora durante las vacaciones de verano? ¿Se van a relajar los actuales hábitos saludables? ¿se nos olvidan?

10/07/2015 Two Boys Playing With Game Console
ESPAÑA EUROPA MADRID SOCIEDAD
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Entre menos deberes o tareas tengan los niños, más tiempo libre tienen para actividades recreativas y descanso; probablemente no se levanten temprano, pasen más tiempo utilizando dispositivos móviles y mirando televisión. Una encuesta realizada en Estados Unidos reveló que, durante las vacaciones los niños pasan hasta 30% más tiempo frente a una pantalla, comparado con la época en que asisten a clases, además de que su consumo de frutas y verduras tuvo una tendencia a disminuir.

Aunque estos cambios no sean permanentes, ni en toda la población infantil, algunos estudios indican que los niños y las niñas tienden a aumentar de peso durante las vacaciones, ya sea en las de verano, diciembre y/o semana santa.

Esto suele suceder principalmente debido a los cambios en los patrones de alimentación y la ausencia o disminución de su actividad física.

Un estudio realizado en México encontró que especialmente durante vacaciones, los niños pasan más de tres horas a la semana mirando televisión o jugando videojuegos en lugar de practicar algún deporte; a pesar de que son ya bien conocidos los beneficios de la actividad física, como mejorar la capacidad del corazón y pulmones, influir de manera positiva en el metabolismo de grasas, estimular el aprendizaje y tener efectos antidepresivos.

Durante el periodo vacacional, los hábitos de alimentación se modifican, pues se cuenta con una mayor accesibilidad a los productos ultraprocesados, y es muy posible que se consuman en mayor cantidad más que por hambre, por antojo.

Algunos consejos que pueden ayudar a mantener hábitos saludables durante las vacaciones son:

Procura que los niños y las niñas duerman las horas necesarias. Desvelarse o dormir poco tiempo puede ocasionar que sientan más apetito o antojo durante el día. Los niños pequeños de 3 a 5 años necesitan dormir en promedio de 10 a 13 horas, comparado con los más grandes de 6 a 13 años, que necesitan dormir de 9 a 11 horas.

Dale tiempo al desayuno. Además de dormir las horas necesarias, es importante que los niños se levanten a una hora adecuada para desayunar, y que no se les junte con otro tiempo de comida.

Mantén botanas saludables a su alcance. Asegúrate que sean verduras y frutas, que sean visualmente atractivas, experimenta con formas, tamaños y texturas. Congelar fruta y licuarla sin azúcar te puede ayudar a crear una deliciosa nieve o smoothies de sabores. Coloca verduras picadas en el refrigerador (zanahoria, jícama, pepino) a su alcance para que puedan tomarlas fácilmente, así como barras de amaranto en la alacena.

Evita que los niños y niñas consuman Productos Ultraprocesados.

Recomendaciones de refrigerios saludables: Ofrece a los niños y niñas refrigerios saludables a la mano como frutas, verduras, quesos frescos, galletas integrales y lácteos.

Frutas de temporada. La sandía, las tunas, el melón, el plátano y la manzana son frutas de temporada que se convierten fundamentales.

Refuerza la práctica de actividad física. Aprovecha que tienen más tiempo para organizar juegos o actividades que impliquen movimiento, el ejemplo comienza por la familia, comienza por ti. Se recomienda que los niños hagan por lo menos una hora al día de juegos o deportes, por lo menos 3 veces por semana de alta intensidad para fortalecer sus músculos. Si están mirando televisión, levantarse y hacer movimientos durante los comerciales es una buena estrategia para que lo vuelvan un hábito. Si cuentan con alguna mascota pueden salir al parque a caminar o jugar con él. Es muy importante que lleven a cabo actividad física ya que previene la obesidad, y mantiene el peso ideal. Mejora la agilidad, los reflejos y la resistencia. Estimula el rendimiento académico. Reduce la ansiedad y la depresión. Si un niño o un adolescente es más activo, utiliza una mayor cantidad de energía, lo que se conoce como “quemar calorías”, lo cual puede influir de manera positiva para perder peso. Es muy importante que la actividad física comience con el ejemplo, los padres deben integrar a su propia actividad física a sus hijos, treinta minutos al día de caminata es un buen comienzo para ver resultados en la salud.

Evita que coman mientras están frente a una pantalla. Ya que distraen su atención de los alimentos que están consumiendo y pueden comer más de lo necesario. Si desean consumir una botana, procura que sea ligera y controla que sea una porción adecuada. Moderar el consumo de dulces y golosinas. En necesario estar al pendiente de las horas que pasa viendo la televisión, aplicaciones, jugando videojuegos y/o conectado a redes sociales, tanto en el día como en la noche.

Finalmente disfruten las vacaciones con actividades que promuevan la convivencia familiar, el juego y la creatividad. Recuerda que los hábitos deben fomentarse en forma positiva, no les impongas actividades ni alimentos, aprovecha para conocer mejor sus gustos y para que prueben nuevos sabores y combinaciones.

Así los niños, ¡estarán listos para volver a clases saludables y con la pila recargada!

 

 

https://www.gob.mx/salud/ Cuidar la alimentación de los niños en el período vacacional.
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Franckle, R., Adler, R., & Davison, K. (2014). Accelerated Weight Gain Among Children During Summer Versus School Year and Related Racial/Ethnic Disparities: A Systematic Review. Preventing Chronic Disease, 11, E101. http://doi.org/10.5888/pcd11.130355 http://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC4060873/
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Etiquetas: niños